Descripción del reinado de la castiza soberana que presidía corridas con mantilla blanca. El texto sigue los primeros pasos de la reina niña y la regencia de María Cristina. Torrijos, Mariana Pineda y Diego de León, aparecen como personalidades románticas adornadas con la rara virtud de la torería. Varios capítulos nos llevan a las habitaciones de palacio donde ocurre de todo, con deshonor para el rey consorte, astifino y corniveleto. Como fondo, música de Rossini, de Barbiéri y el canto de las barricadas revolucionarias, donde se parapetan "Curro Cuchares" y "El Tato".
Con Espartero en el poder "Paquiro" es conde de Chiclana en el corazón de la reina. Destronada Isabel II, presidirán Cánovas y Sagasta la Fiesta Nacional, cuando manden "Lagartijo" y "Frascuelo". La reina, desterrada en París, vuelve a Sevilla para ver los toros y encuentra una España ni más esperpéntica ni menos que la suya.