En Disonancias, Theodor W. Adorno ofrecía una soberbia reflexión sobre las nuevas formas musicales que se estaban creando por efecto de la sociedad capitalista post-industrial de los años sesenta. La obra examinaba las consecuencias que tales modificaciones tienen no solo sobre la música sino también en los fenómenos sociales, perceptivos y psicológicos. Para el teórico de la Escuela de Frankfurt, la disonancia es lo inarmónico, lo que provoca un estado regresivo, un paso atrás en el orden del proyecto ilustrado, un ataque a los ideales de bien, verdad y belleza que la humanidad ha anhelado desde el periodo clásico.
El presente título ofrece un brillante análisis de las estrategias de disonancia que han conducido al aturdimiento y la anomia de la nueva sociedad, así como una denuncia de la ideología latente tras el estado de desorden y desconcierto. Conscientes de estas tácticas de manipulación, se impone la necesidad de recuperar el análisis crítico y reelaborar las ideas esenciales de la Ilustración como herramienta fundamental contra la ignorancia planificada y la cínica justificación de la desigualdad propia de esta «poliédrica sociedad disonante» en la que sobrevivimos.