En 1549 el navarro Francisco Javier atracó en Kagoshima, y con su llegada a Japón se inauguraron las
relaciones entre europeos y japoneses. Este libro traza las relaciones entre España y Japón desde su origen, a mitad
del siglo XVI, pasando por el periodo de expansión militarista del Imperio del Sol Naciente, hasta la actualidad. El
autor se detiene en el periodo de expansión nipona, puesto que España representó entonces los intereses diplomáticos
japoneses en el mundo, durante la Primera y la Segunda Guerras Mundiales, y relata episodios como un quimérico plan del
franquismo para enviar una División Azul a luchar junto a las tropas japonesas con la esperanza de recuperar la
influencia española sobre la antigua colonia de Filipinas. Pero también dedica atención al periodo actual: analiza
desde las inversiones japonesas en nuestro país hasta la popularidad de Gaudí y el flamenco en Japón, y da cuenta tanto
de las vivencias de los actuales hidalgos en Japón como de las experiencias de los samuráis contemporáneos en España.
El resultado es un relato vivo y directo, sobre una de las potencias económicas mundiales en la que sus habitantes se
caracterizan por sobreponerse a la adversidad, ya sea un implacable bombardeo atómico, un tsunami devastador o un grave
accidente nuclear.