He aquí un retrato de Jesús inequívocamente claro, convincente, sugerente y distinto. Una presentación del hombre tal como fue antes de ser encerrado en doctrinas, dogmas y ritos, antes de convertirse en objeto de la fe cristiana. Nada se da por supuesto; se permite, por el contrario, que hablen por sí mismos los datos hitóricos que poseemos acerca de Jesús. Nos hallamos ante un hombre profundamente comprometido con los verdaderos problemas de su tiempo, que resultan ser también los verdaderos problemas de nuestro tiempo.
Es la historia de un Jesús inconfundiblemente humano. Sólo al final, en el último capítulo, el autor, volviendo del revés muchas de nuestras ideas preconcebidas, nos muestra una forma sorprendentemente nueva de entender lo que significa la divinidad de Jesús.
Un libro del que todos pueden sacar provecho: el especialista, el laico, el religoso, e incluso el que ya no sabe si cree o no.