Judaísmo y cristianismo no forman un todo porque ambas religiones son exteriores una con respecto a la otra, aunque la segunda siga de cerca a la primera: se codean pero no se confunden. Javier Teixidor examina su relación mutua y sus divergencias en determinados momentos de la historia, no solo lo que fueron en los primeros siglos, sino, sobre todo, lo que representaron más tarde en las épocas moderna y contemporánea, prestando especial atención a la cuestión del antisemitismo. Recurre así a la obra de pensadores y escritores como Moses Mendelssohn, Franz Rosenzweig, Marcel Proust o Hannah Arendt.