El problema de la tolerancia se plantea en términos nuevos después del Concilio Vaticano II. La actitud defensiva frente al ?espíritu de la época? ha dado paso a una apertura al diálogo. En el ensayo que ocupa la parte más extensa de este volumen, Rahner muestra de qué modo, a pesar de todas las resistencias internas, la nueva tendencia de apertura se va abriendo paso. Necesariamente esta mutación provoca nuevos problemas y conflictos entre el pluralismo hoy aceptado y la rigidez dogmática de ayer.
A juicio del teólogo más importante del s. XX, la Iglesia puede aprender de nuestra sociedad, en la que se superan con eficacia las situaciones conflictivas en el seno de las instituciones convirtiendo en soluciones aquello que parecían puntos oscuros. El camino hacia el futuro debe hacerse con este espíritu de tolerancia.