Un impactante debut que combina terror, crítica social y una narrativa que no podrás soltar.
La vida de Ji-won, una joven coreano-americana, se quiebra tras la traición de su padre, que abandona a su familia y la deja con el peso de sostener los restos de su hogar. La llegada de George, el nuevo novio de su madre, introduce una inquietante sombra. Sus ojos azules despiertan en Ji-won una fascinación perturbadora, alimentada por un ritual coreano: comer ojos de pescado para atraer la suerte.
Lo que empieza como un gesto de respeto hacia su cultura, se transforma en una obsesión voraz que la arrastra a un abismo oscuro, donde el deseo de consumir ojos humanos se convierte en una inquietante realidad. Narrada con una voz visceral, Los ojos son la mejor parte explora la génesis de una asesina en serie, el trauma y los límites de la cordura en un viaje tan fascinante como aterrador.