El célebre palentólogo estadounidense demuestra cómo el conocimiento de la naturaleza nos permite deducir un mensaje para nuestras vidas.
Como en La vida maravillosa o en «Brontosaurus» y la nalga del ministro, Stephen Jay Gould despliega aquí ante nuestros ojos las maravillas de la naturaleza y fija nuestra atención sobre algunas cuestiones enigmáticas: ¿qué nos dicen el extraño pulgar del panda, las migraciones de las tortugas marinas y la diversidad de los «peces pescadores» acerca de las imperfecciones que hacen de la naturaleza «una magnífica cahpucera y no un divino artífice»? ¿Por qué los seres humanos nacen varones y mujeres en números aproximadamente igual? ¿Qué relación hay entre la evolución que el Mickey Mouse de Walt Disney experimentó con los años y la búsqueda de la eterna juventud? ¿Por qué el padre Teilhard de Chardin se implicó en la gran estafa científica que fue el llamado «hombre de Piltdown»? ¿Cómo se falsificaron las evidencias para tratar de demostrar que los negros eran inferiores a los blancos y las mujeres a los hombres? ¿Qué prejuicios racistas se esconden tras el término «monogolismo», acuñado por Down? ¿Cabríamos dentro de la célula de una esponja? Pero Stephen Jay Gould no nos desvela el secreto de estas y otras muchas cuestiones sólo para entretener nuestro ocio. Partiendo de una reflexión de Plinio - «En ningún lugar se encuentra la naturaleza en su totalidad tanto como en sus más perqueñas criaturas»-, utiliza estas fascinantes curiosidades para ilustrarnos acerca de la teoría de la evolución - «las rarezas de la naturaleza nos permiten poner a prueba las teorías sobre la historia de la vida y su significado-», y para mostrarnos que del conocimiento de la naturaleza podemos deducir «mensajes para nuestras vidas» y una mejor comprensióin de las paradojas de la condición humana.