En su primer poemario, Paula Martínez (Sevilla, 1994) pone el foco en la tierra y en su ciclo vital para desarrollar una poesía repleta de imágenes, madurez y rotundidad. Con una mirada pausada a la par que inquietante, reflexiva y delicada, que se posa sobre las dunas, las olas y su vaivén, las formas de la luz, este libro alumbra una voz que busca y que se busca, se reconoce en el paisaje, se funde con él para fortalecerse. Un poema de La fuerza de la tierra: «Erosionada por el agua / una piedra choca con la espuma blanca / cae contra las rocas / detienen la fuerza del agua / de la corriente / la marea que sube / y que luego / bajará con ella toda / la vida de esa piedra / erosionando el borde / y todo lo que bajo ella /aguarda».