Si EL SOFISTA es uno de los diálogos de PLATÓN que más ha atraído a estudiosos y amantes de la Filosofía, ello se debe tanto por su contenido y relevancia en el conjunto de la obra platónica como por la influencia que, hasta nuestros días, ha ejercido en la conformación de importantes conceptos del pensamiento occidental. Traducido y preparado por Francesc Casadesús Bordoy, el diálogo, que plasma el desafío que representa "cazar" al sofista mediante las redes de la dialéctica, llega a la conclusión de que éste es un imitador que se mueve con total libertad en el ámbito de la falsedad y la apariencia, en contraste con el sabio y el filósofo, dedicados a la búsqueda de la verdad.