Este libro expone qué motivos llevaron a Salinas a escribir teatro en su madurez. Si los expertos señalan la nostalgia de la patria y la necesidad de escuchar la propia lengua, este ensayo se centrará en aspectos no tratados que pudieron incentivar el interés de Salinas por la dramaturgia: en concreto, la posibilidad de proyectar los propios conflictos personales en la escena y su valor como instrumento pedagógico en la actividad docente.
Se incluyen dos piezas de teatro escritas por docentes españoles para ser representadas en el escenario del Play House de Middlebury College: "Doña Gramática" (1942), obra de cuya autoría participó Pedro Salinas, junto a Joaquín Casalduero, Enrique Díez-Canedo, Augusto Centeno y otros, y "Consonancias peligrosas" o "El triunfo del Hispanismo" (1950), escrita por Francisco García Lorca y Jorge Mañach. Las dos son hoy un valioso documento testimonial del vínculo entre hispanistas. "Consonancias peligrosas", por su parte, farsa inédita y desconocida, se publica por vez primera desde su creación.