Si quieren aprender matemáticas deberían jugar billar. Este juego no es de vagos, ¡Quién diría que, al contrario, es ideal para comprender conceptos fundamentales de matemáticas y física! Carlos Bosch (coautor de Las matemáticas: perejil de todas las salsas, publicado en este misma colección) demuestra, con abundancia de ejemplos y mediante la resolución de problemas geométricos y algebraicos, que el billar merece utilizarse como una lúdica herramienta de razonamiento. El autor toma como punto de partida el regalo de un taco de billar para esbozar la historia de este juego y explicar sus nociones básicas y los detalles de su evolución.