Volar a 3.000 metros de altura, localizar el objetivo, poner el avión en vuelo invertido, lanzarse en picado a 450 km. Por hora, soltar las bombas, acertar y recuperar altura soportanto una aceleración capaz de dejar a un hombre inconsciente, no es tarea fácil. Especialmente si se hace bajo el fuego antiaéreo y con aviones de caza acechando. Pues bien, hubo pilotos que lo hicieron más de mil veces, sobreviviendo algunos de ellos a la guerra y volviendo a volar en la Luftwaffe, ya dentro de la OTAN, para hacer frente a la amenaza de la Rusia soviética. Este libro cuenta su historia, y también la historia de su avión, el Junkers Ju 87 Stuka, un aparato que aquellos aviadores convirtieron en un mito mientras pasaban a ser considerados héroes. Se rodaron películas, se escribieron libros, se compusieron canciones e incluso se vendieron juegos basados en sus hazañas. Finalizada la guerra, la experiencia acumulada por aquellos pilotos y las tácticas que desarrollaron, fueron estudiadas durante años en diversas fuerzas aéreas. Razones sobradas había para ello. Los "ases" de stuka dejaron fuera de combate, portaavio