Arder o quemar es un poemario en el que el autor enfrenta al lector con una de esas dicotomías vitales que querríamos evitar: aprender a arder -soltar lastres, henchirse de júbilo, estallar en risas- o a quemar -causar dolor, pisar los corazones humanos, destrozar el mundo-. Con un gran lirismo y una fuerza volcánica inusitada, este libro es la espada salida de los versos del poeta, que abre una herida y, al tiempo, cauteriza la piel; duele y alivia. Arder o quemar invita a la combustión de los cuerpos hasta los cimientos del alma y a acoger el fuego de la poesía. El poeta Ángelo Néstore firma el prólogo de este libro, en el que afirma: «Miro a Carlos y veo a un gigante, él es Vulcano, él es la bestia con tres cuellos: uno no es del tamaño de su estatura sino del que uno ve, insistía Pessoa. Por eso acojo sus versos con el ímpetu de quien ama el golpe, me rindo ante la dulce imagen de arder y quemar a la vez: esa extraña sensación de cerrar un libro y sentir en las manos la fulguración de los versos que aún palpitan». «Los alargados, elegantes, versículos de Carlos Asensio no son más largos que su esperanza en el idioma de la poesía. Arder o quemar es un derroche de imaginería que nos enciende el músculo de la emoción y el del placer literario. De su lectura envolvente, arrolladora, solo se puede volver con todos los sentidos excitados.» Yolanda Castaño