Bitácora de un guerrero de la Luz Existe una cábala teórica, abstracta, intelectual, que es lo que generalmente denominamos cábala a secas y la asociamos a un complejísimo desarrollo de la estructura del Universo. Pero también contamos con una cábala práctica, que juega con elementos de aplicación a la vida diaria. Sin embargo, personalmente, la primera siempre acabó resultándome peligrosamente distractiva y la segunda excesivamente engorrosa. Un viejo axioma reza: «si es espiritual, es simple». He intentado reflejar esa simpleza en una visión que, simplemente para diferenciarla, podríamos llamar «cábala vivencial». Siguiendo una orden interna, he tratado de dar a luz el libro que me habría gustado leer hace años. No un libro para el erudito, atrincherado tras sus pergaminos, ni para el místico absorto en sus fórmulas, permutaciones y símbolos, sino uno al que el combatiente promedio pudiese recurrir en momentos de oscuridad existencial. Sería muy pretencioso pretender «enseñar» al respecto. Creo que es más realista pensar en acompañar. Que el luchador que busca la Verdad pueda mirar sus páginas y sentir que no es el único en el mundo que está soportando, ahora mismo, el peso de esta carrera contra la oscuridad en el mundo. Que pudiera decir: «a mí también me pasa». En gran medida, es mi propia bitácora, ofrecida como cuaderno de apuntes para el camino de cada uno y si se quiere, como forma de consuelo. Si puede servir para que el guerrero de Luz coja fuerzas para transformarse y así transformar al mundo (facilitar el tikún Olam), más que estas humildes páginas, mi propia vida y su contenido de alegrías y sufrimiento habrán adquirido un bello propósito.