El Yoga -literalmente yugo o unión- es uno de los seis Darshanas, las corrientes clásicas de pensamiento emanadas de los Vedas, y por tanto su origen podemos remontarlo hasta las mismas fuentes de la espiritualidad de la India. Los Yoga-Sutra de Patanjali es el primer texto de yoga conservado íntegramente, escrito en torno a los años 300 o 400 de nuestra era.
Su contenido lo forman 195 breves aforismos que constituyen una síntesis magistral soabre la estructuración, funciones y estados de la mente, así como una guía muy precisa sobre la práctica del yoga. Este texto es considerado, por tanto, la obra capital de esta disciplina, ya que aporta al practicante el soporte teórico donde se asienta la filosofía yóguica, y al profano, el fundamento para penetrar en una sabiduría milenaria. Esta versión comentada se debe a T. K. V. Desikachar, profesor de yoga en Madras e internacionalmente reconocido como una autoridad a través de los cursos y conferencias que imparte en Occidente. El texto es absolutamente fiel al original sánscrito, y los comentarios del autor son un tesoro de conocimiento y experiencia en la práctica del yoga.