Varsovia, 1941. Un asesino en serie pretende acabar con la 250;ltima esperanza de los habitantes del gueto jud237;o matando a sus ni241;os y dejando tras de s237; una macabra firma: a la peque241;a Anna le hab237;an cortado una mano y ahora Adam, de apenas 9 a241;os, ha sido hallado sin su pierna derecha. Desafiando el crudo invierno polaco y la brutalidad nazi, el psic243;logo Erik Cohen, antiguo disc237;pulo de Freud en Viena, recorre la ciudad en busca del criminal. Le ayudan tan solo un viejo amigo de la infancia, Izzy, y su ansia de justicia y venganza. A fin de cuentas, por las venas de Adam corr237;a su misma sangre.160;
Con Los anagramas de Varsovia, Richard Zimler nos ofrece una apasionante novela negra, un sugerente cuento de fantasmas y un conmovedor retrato de la penosa vida en el gueto de Varsovia. Un escenario de pesadilla donde la muerte, agazapada bajo una esv225;stica o no, se encontraba siempre a la vuelta de la esquina.