Estamos a mediados de los años noventa y Bruno se enfrenta a su primer día de instituto. La verdad es que para tener casi quince años es un chico muy bajito, y todo comienza a torcerse cuando se enamora perdidamente de Claudia, que es la chica más alta de su clase. No estás a la altura es un paseo por todos los miedos, los complejos o la falta de comunicación de los sentimientos que afloran por primera vez, pero... ¿Son nuestros complejos los que nos hacen imposible avanzar? ¿Y si pudiésemos saber lo que la otra persona está pensando sobre nosotros? ¿Cuántas veces has sentido que no estabas a la altura? Tranquilo, lo vas a entender todo con esta bonita historia.