Este libro va de aquelarres, que es lo mismo que decir que va de brujas, de reniegos, de pactos diabólicos, de banquetes macabros, de orgías delirantes, de fechorías múltiples y de prodigios sin fin. Pero va también, por todo ello, de fantasía ilimitada, de credulidad, de intolerancia, de intransigencia, de desvarío y de delirio humano. No están todos, pues la geografía brujeril ibérica es en este aspecto prácticamente ilimitada. Pero sí están los tenidos por principales, con sus anécdotas, su historia y su ubicación. Unos ficticios y de toponimia incierta. otros sonados, famosos y hasta muy visitados. Algunos prácticamente desconocidos, pese a lo que en su momento supusieron. Y todos, absolutamente todos, los que aparecen y los que no aparecen en estas páginas, hijos de la imaginación más desbordada.