Esta novela está llena de chicas. Ellas llevan la batuta. De Nueva York a París, de la Borgoña a Londres o Miami. Chicas que inventan, se encienden, aman.
¿Y los hombres? Ellos también están. Pero son las muchachas las que bailan, bailan, bailan. Ellas hacen volar su destino esplendoroso.