Shane sirvió de inspiración para la película Raíces profundas,
dirigida por George Stevens en 1953, con guión de A.B.
Guthrie Jr., y protagonizada por Alan Ladd.
En el año 2007, la asociación de Escritores de Western Americanos, que
agrupa a los principales autores del género, decidió que la mejor novela
western escrita en el siglo XX era Shane (1949), la primera novela de Jack
Schaefer, y la mejor película del género Raíces profundas, la adaptación
cinematográfica de esta novela que dirigió en 1953 George Stevens.
Jack Schaefer nació en 1907 en Cleveland (Ohio), y aunque comenzó a
estudiar Literatura, pronto abandona los estudios para dedicarse al
periodismo. Fue editor en el New Haven Journal Courier y el Baltimore
Sun y publicó centenares de artículos divulgativos sobre la vida en la
frontera estadounidense.
La acción de Shane transcurre en Wyoming, en 1889. A la granja de los
Starret llega un misterioso jinete. Está de paso, viste de oscuro y, aunque
resulta sombrío, parece educado. Conquistados por su enigmático atractivo,
el matrimonio de colonos invita al forastero a comer y pernoctar.
El recién llegado pide que le llamen Shane y se muestra cortesmente evasivo
sobre su pasado. Los Starret cuentan a su invitado que los colonos
que ocupan aquellas tierras son acosados por LukeFletcher, propietario
de un extenso rancho, que quiere echarlos de sus tierras para incrementar
su explotación ganadera. Inevitablemente, la amistad de Shane con
los Starret le llevará a alinearse con ellos frente al pequeño ejército privado
del ranchero.
La edición se completa con cinco relatos, entre los que destacan "Cooter
James", "Ese caballo llamado Mark" y "Jacob", historias narradas con un
tono menos épico y trágico y con más humor y ternura.