Cuando la protagonista de esta historia se queda embarazada, toma la firme decisión de no incurrir en los mismos errores que cometieron sus padres, propósito que le resultará prácticamente imposible. Emprende, entonces, un plan que consiste en solucionar los asuntos de su vida que aún no están resueltos: la relación con su madre, con el dinero, con sus ex, con la profesión, el compromiso, la enfermedad, la mentira, la libertad. En este camino se encontrará inevitablemente con sus miedos, deseos y contradicciones. Un viaje emocional –y a la vez insólito–, a través de reflexiones, imágenes alegóricas y una crítica constructiva sobre la compleja relación que tenemos con la maternidad, renovando la experiencia del feminismo, la sexualidad y el trabajo personal, y exponiendo al lector a través del humor a los límites de la escatología, la intimidad y el entretenimiento. Valeria nos ofrece una narración que, a modo de muñecas rusas, intercala historias de infancia, inmigración, ladrones armados en Buenos Aires, la vida de la abuela Pina, los sueños en París, y reflexiones sobre política, gestación, el consumismo reinante, la vida después de la muerte, la brujería, las terapias y el amor.