Escrita en Roma (1980) y publicada en 1984, es una de las reflexiones poéticas más insondables y conmovedoras de una experiencia de exilio (1975-1989). Compuesta de veintiséis fragmentos, esta crónica, de subtítulo Notas al pie de una derrota, fija el doble carácter introspectivo y político de un texto que funde magistralmente poesía y prosa. La palabra de Gelman alcanza una reflexión suprema cuando interroga, para postular la memoria como un deber.
El artista Carlos Alonso, quien también sufrió persecuciones, atentados y la desaparición de su hija, seleccionó doce trabajos que expresan con intensidad el sentimiento y la profundidad característica del texto de Juan Gelman.