Siete historias, siete vidas aparentemente muy distintas pero con un misterioso y poderoso nexo común. Benito Garrido de Culturamas ha dicho de la autora: "Es una escritora perspicaz, efectiva, de ideas claras y profundas reflexiones, muestra de la imperativa lucidez que debe tener un creador para ponerse en la piel de sus personajes, y revelar las diferentes miradas con que cada uno enfrenta la vida.
Una niña se ve obligada a jugar a la rayuela ininterrumpidamente.
Un hombre inicia una relación enfermiza que recuerda a la que comenzó con aquel anuncio tristemente célebre: Se buscan hombres, jóvenes y robustos, para ser devorados.
Un abogado apela al caso Gary Gilmore contra el Pueblo de Utah en su alegato de defensa.
Una mujer trata de comunicar una noticia importante a su hija a ritmo de aeróbic.
Un adolescente pide que le administren la extremaunción vía Twitter.
Una madre le escribe a su hija, que no fue.
Un profesor de literatura acaba ingresando en una especie de "Club de los Hachisianos" similar al que frecuentaban de Nerval, Dumas o Baudelaire.
Aunque aparentemente poco tienen en común estas personas, sus voces parecen corear a Cortázar sin saberlo: «el Bardo nos devuelve a la vida, a la necesidad de una vida pura, precisamente cuando
ya no hay escapatoria.». Es precisamente en esa frase interrumpida extraída de Rayuela, en esos puntos suspensivos, donde se cruzan las siete vidas que protagonizan el nuevo libro de Rebeca García Nieto,
a medio camino entre la colección de relatos y la novela coral.