En su búsqueda de una historia interesante para escribir, Sonia conoce a un exiliado de la humanidad que le cuenta un relato que comienza con un accidente de tren en el que mueren los padres de Laia, quien, decidida a permanecer cerca de su tumba, encontrará una nueva familia en una humilde pensión.
Su trabajo le lleva a conocer a Khaled de quien se enamora, con todos los condicionantes de la cultura indo/musulmana de la época.
La joven tiene un secreto: su habilidad innata para bailar maravillosamente. Descubierta por un empresario, este consigue que la joven baile profesionalmente.
La fama, poco amiga de la pureza de espíritu, encuentra un modo de difamarla, provocar los celos en su prometido y despertar el deseo de un hombre poderoso que no soportará el rechazo de la joven e ingenua bailarina.