A finales del siglo XIX la joven Helena Kín decide recluirse en un convento de la ciudad de Pittsburg, tratando de eludir los efectos del funesto sortilegio al que dice estar sometida. Un orgulloso psiquiatra acepta su caso sin sospechar la vorágine de acontecimientos que acabarán con su prometedor futuro profesional y borrarán de su carácter cualquier atisbo de soberbia. Locura o maldición, obsesión o embrujo, Helena Kín está poseída de sensuales poderes que la subyugan, gobernando a su antojo a aquellos que la rodean y convirtiéndose en el eje esencial de una trama tejida por obscenas inclinaciones, oscuros intereses económicos y abyecto pragmatismo, en la que nada es exactamente lo que parece.
Redactada en forma epistolar, esta novela de misterio y erotismo está estructurada en dos niveles de lectura complementarios. El lector es libre de disfrutar de una narración de intriga psicológica a través de las cartas del doctor o sumergirse en una historia más profunda y mundana, con las notas del sibilino personaje señor B., para descubrir el significado alegórico de los protagonistas y las veladas referencias a personajes históricos, pudiendo compartir ideas, opiniones y puntos de vista en .