Un bolso es un accesorio muy personal que puede ser de tipo deportivo, práctico, de moda o elegante y de lujo. Cada bolso forma parte de la propia personalidad. ¿Qué mejor que tejer su propio bolso y convertirlo en fieltro en la lavadora? Para ello hay que utilizar lana con un alto porcentaje de lana merina, que es la ideal para realizar estas labores de moda; el fieltro, nos lo hace la lavadora. Unos cierres o adornos exclusivos convierten el bolso en una pieza única.
Realizado con agujas gruesas, el tejido avanza con rapidez y, gracias a las instrucciones paso a paso del libro, el éxito está garantizado.
A quien le guste experimentar y quiera probar una nueva técnica, encontrará aquí lo que está buscando.