Desde que descubrió que Miri, su hermana pequeña, tiene poderes mágicos, Rachel no para de formular deseos, y uno de los principales es recuperar el amor de Raf. Claro que, por desgracia, los hechizos de Miri no siempre funcionan, así que Rachel se encuentra con un pequeño imprevisto: el conjuro de amor no ha hecho efecto en Raf, sino en su hermano mayor, Will. Además, en su noble propósito de salvar el planeta Tierra con todo tipo de hechizos para reducir el agujero de la capa de ozono, salvar las ballenas, proteger las especies amenazadas, etc., Miri se carga el gimnasio y la cafetería de la escuela donde debía celebrarse el baile de graduación. Rachel, que iba a asistir a la fiesta con Will, está desesperada. Y para colmo, su madre no está nunca en casa y no parece darse cuenta de nada, por lo que Rachel tendrá que espabilarse sola y hacerlo a toda prisa, ya que la fecha del baile se acerca.