Los hermanos Callender, miembros del Club de los sabuesos, tienen una enorme curiosidad y un gran espíritu de aventura. Cuando su padre es elegido director de una exposición en París, están encantados de pasar allí unas vacaciones..., que no serán tan tranquilas al comprobar que el Escriba sentado, la pieza maestra de la exposición, no es más que una imitación.