Charlot es un tren de cine. Ha escapado de milagro de las flechas de los indios apaches y de los tiroteos entre los malhechores y la policía, ha visto peleas peligrosísimas en el techo de sus vagones, se ha reído muchísimo con las peripecias de dos hombres disfrazados de mujer y se ha emocionado con las escenas de amor. Revive, como en una película, todas las aventuras de Charlot y de Carola, su maquinista.