Una aventura desternillante sobre cómo confeccionar mapas, hacer amigos y huir a la desesperada alguna que otra vez...
Hugo es aprendiz de cartógrafo, y lo normal para un aprendiz de cartógrafo es sentarse en un taburete a copiar mapas o practicar actualizando planos de la ciudad. Pero Hugo no está en una ciudad, sino en unas montañas de la Transilvania profunda (de las que, por cierto, todavía no hay mapas) acompañado de una gata adivina, un hombre lobo atormentado, un abominable oranguvamp, y Salvaje, su pequeño e inseparable ratón. Por raro que parezca, son un equipo de rescate: una peligrosa criatura ha secuestrado al tío Walter y ellos son los únicos que pueden liberarle.