Sobre el libro: La eclosión de EE.UU. como superpotencia después de 1945 fue el resultado de un largo proceso desarrollado durante la primera mitad del llamado siglo americano. Su participación en la Primera Guerra Mundial significó un punto de inflexión en su política de no intervención en los conflictos europeos. Desde los años 20, EE.UU. no dejó ya de mediar en los problemas del Viejo Continente. Simultáneamente, su diplomacia trabajó para que ciertos productos y compañías estadounidenses fueran conquistando los mercados al otro lado del Atlántico. Esta monografía estudia la gestación de la hegemonía norteamericana en Europa a través del caso español, cuya importancia nació mucho antes que los acuerdos de las bases de 1953. A partir de 1898, España se vio involucrada en muchas actividades de la diplomacia moral estadounidense, desde los acuerdos de conciliación previos a 1914 hasta el pacto Briand-Kellogg a finales de los años 20. Durante la Gran Guerra tuvo un importante papel en los planes bélicos de Norteamérica, viéndose sometida a los vaivenes y las presiones provenientes de Washington. A partir de entonces, comenzó a recibir la llegada masiva de mercaderías y empresas estadounidenses en un patrón que se prolongó durante la década de 1920. A lo largo esos años, la política de los Estados Unidos hacia España se homologó sustancialmente con la seguida en el resto de Europa Occidental.
Sobre el autor: José Antonio Montero Jiménez es profesor de Historia Contemporánea en la Universidad Complutense de Madrid, donde se doctoró el año 2006. Ha sido investigador en la London School of Economics, y durante dos años (2007-2009) en la Universidad de Georgetown, asociado a la Cátedra Príncipe de Asturias. Especialista en la historia de la política exterior de EE.UU., sus trabajos han aparecido en distintas revistas especializadas españolas y extranjeras. El despertar de la gran potencia es su primera monografía.