En esta región de imponentes montañas, paisajes espectaculares y diversidad cultural confluyen Asia y Europa, a menudo con resultados impredecibles y fascinantes.
La gigantesca cadena montañosa que forma una frontera natural entre el Cáucaso meridional y Rusia, el Gran Cáucaso, se despliega desde el mar Negro y el mar Caspio y ofrece el paisaje más impresionante de la región, con su secuencia de imponentes cimas, verdes valles fluviales y pueblos increíblemente pintorescos. Las regiones de montaña están jalonadas de espectaculares rutas para montar a caballo y hacer senderismo, donde suele haber fortalezas en ruinas, atalayas y antiguas iglesias encaramadas en lugares de extraordinaria belleza.