Yokakis, samurais, yakuza, geishas, monstruos gigantes, sexualidad malsana, surrrealismo historico, leyendas ancestrales, honorabilidad... Estos son solo algunos de los elementos que pueblan una cinematografía japonesa, que, al igual que el país que lo contiene, se debate en una lucha eterna entre la tradición y la modernidad. Poseedor de una rica y extensa filmografía que, pese a ser hoy bastante más conocidad de lo que lo era hace no muchos años, sigue siwendo una gran desconocida para un amplio espectro del público occidental; espectadores que tienden a catalogar el cine japonés bajo unos parámetro erróneos y derivados de equivocadas ideas preconcebidas, extrapoladas de películas estereotipadas que en absoluto dan una visión fidedigna de la realaidad.
La cinematografía japonesa guarda dentro de sí muchas y variadas propuestas que nos hacen mirar con esepranza hacia oriente, ya que Japón es dueña de una cultura audiovisual envidiable y lo sificientemente diferente a la nuestra, la occidental, como para detenerse sobre ella y descubrir verdaderas joyas fílmicas. Sirvan puess estas páginas como una guía iniciática que fomente la curiosidad en el lector y le anime a bucear libremente en el profundo, rico, variado y hermoso mas de sensaciones y emociones que es el cine japonés