Con la presente edición, promovida por Manuela Ádamo y prologada por Jaime D. Parra, se recupera ahora una obra fundamental que no se editaba desde hacía casi setenta años, clave para conocer la antropología aragonesa relacionada con los ritos medicinales y el mundo de la danza, y se hace justicia a un autor clave que dedicó una parte de su vida -periodo hispánico- al estudio de nuestro folclore, aquel a quien el mismo Juan Eduardo Cirlot siempre consideró su maestro y al que dedicó su obra máxima, el Diccionario de símbolos. La danza de las espadas y la tarantela sintetiza, de algún modo, sobre todo en el capítulo segundo, la teoría de Schneider sobre el ritmo común y el mundo de las correspondencias.