La acción de la novela transcurre la acción en la segunda mitad del siglo XVI, en torno a la figura histórica de Felipe de Bardaxí, señor de la localidad altoaragonesa de San Juan (valle de Chistau). Contrabandista de caballos, en una época en la que estaba prohibido su comercio con el vecino reino de Francia, el relato nos sitúa de lleno en una época convulsa en estas tierras fronterizas, en donde se entrelazan las luchas de banderías entre la nobleza aragonesa, las guerras de religión en suelo francés entre hugonotes y católicos, la política antiprotestante de Felipe II y los conflictos antiseñoriales.