El volumen es un viaje por la España del primer tercio del siglo XX a través de la lente del genial fotógrafo madrileño Alfonso. Se trata de uno de los periodos más agitados, apasionantes y trágicos de nuestra historia que desembocó en la Guerra Civil y la posterior dictadura franquista.
El libro gira en torno a un eje: la sublevación republicana protagonizada por los capitanes Fermín Galán y Ángel García Hernández el 12 de diciembre de 1930 en Jaca. Para el autor, la causa de esta insurrección fue el declive irreversible de la Monarquía de Alfonso XIII; la proclamación de la segunda República mediante unas elecciones democráticas cuatro meses después, su consecuencia directa.
El libro, que reúne cerca de 500 imágenes, es el resultado de la exhaustiva investigación en los fondos del fotógrafo madrileño Alfonso sobre los sucesos de Jaca, que cubrió como reportero para los diarios El Sol y La Voz. La recuperación de un valioso material inédito de aquellas históricas jornadas ha dado pie a este libro que proyecta desde el ámbito local una perspectiva general de lo que fue España entre 1923 y 1936.
Alfonso Sánchez, uno de los periodistas gráficos más importantes del periodismo español de la época, y sus hijos Alfonsito, Luis y Pepe, estuvieron presentes en buena parte de los acontecimientos políticos, sociales y culturales más relevantes de aquellos años. A través de sus fantásticas imágenes -muchas de ellas sobradamente conocidas- el libro sigue el curso de la historia española y rescata la esencia de un tiempo convulsión y de esperanzas.
El fotógrafo Alfonso y la sublevación de Jaca
Alfonso estuvo en la ciudad altoaragonesa en la jornada del domingo 14 fotografiando las calles y plazas que habían sido escenario mudo de aquél acceso revolucionario. Antes había estado en Huesca y Cillas, en donde se habían enfrentado las tropas monárquicas con la columna que bajaba del Pirineo. Sus placas captaron el caos del choque y la huida desordenada de los insurrectos, el dolor de los heridos y el tumulto popular. El lunes 15, con una memorable nevada que venía a cumplir los presagios de Fermín Galán, Alfonso estuvo en el entierro del guardia civil Félix Mínguez, una de las víctimas de la sublevación. La nieve aporta una atmósfera de abrupto drama a esas fotos de realismo tangible.
El fotógrafo madrileño distribuyó entre la prensa de la época tan sólo una parte de todas las instantáneas realizadas en su viaje oscense, pero el grueso del reportaje se quedó en su archivo junto a material descartado, restos y placas defectuosas. Fruto de una exhaustiva investigación en su inmenso fondo, el historiador Juan José Oña ha logrado rescatar el conjunto íntegro de esas fotos, muchas de ellas de un valor histórico, documental y estético incuestionables. Son el documento gráfico de un reportero de gran instinto y dilatada experiencia, que consigue concentrar en cada placa toda la angustia de un momento desconcertante.
En el mes de marzo de 1931 el hijo de Alfonso, Alfonsito, volvió a Jaca para seguir los juicios militares contra los encausados por su participación en los sucesos de diciembre. Fiel heredero del estilo y destreza del padre, el joven fotógrafo realiza un extenso reportaje de los prolegómenos y de las sesiones celebradas en el Regimiento Galicia, del que sólo se publica una pequeña parte. La foto del capitán Sediles entre rejas y custodiado por un soldado es una de las más populares.
En “Los años convulsos” se ha recopilado una pequeña parte pero muy significativa de todo el archivo de Alfonso depositado actualmente en el Archivo General de la Administración de Alcalá de Henares. El libro está dividido en dos partes claramente diferenciadas; en la primera se analizan los hechos acontecidos en Jaca, Ayerbe y Huesca entre el 12 y 14 de diciembre de 1930, así como los juicios de marzo del año siguiente y su repercusión en los albores republicanos. En este capítulo no sólo se incluyen fotografías de Alfonso sino también de otros fotógrafos que cubrieron para diversos medios aquellas jornadas. Igualmente se ha realizado un notable esfuerzo para recuperar las portadas de los periódicos y revistas de la época en un intento de enfatizar el enorme eco que tuvo la sublevación en todo el país.
La segunda parte del libro está dedicada exclusivamente a Alfonso. A través de sus fotografías se revisan los principales acontecimientos que marcaron el devenir histórico del país entre 1923 (golpe de estado de Primo de Rivera) y 1936 (Guerra Civil). Muchos de los protagonistas de la insurrección de Jaca vuelven a adquirir notoriedad pública en la primavera republicana y en el horror de la contienda, erigiéndose en vasos comunicantes de algunos episodios de la historia española.En torno a la sublevación de Jaca se construye pues este libro. Pero no es su único fin. Más bien se trata de un medio para reflejar el contexto histórico de ese tiempo. Desde el ámbito local de la insurrección, “Los años convulsos” proyecta la dimensión nacional de los hechos y los imbrica en una época de grandes cambios en España.
