En palabras del que ha sido alcalde de Alquezar, Mariano Altemir Lascorz, podemos el origen de esta entrañable biografía. Cuando ya hace un tiempo comenzamos a pensar en la necesidad de escribir un libro sobre José María Cabrero Bastaras, tuvimos en cuenta dos factores fundamentales: El primero, escribirlo en vida del homenajeado, y que él mismo participara, de una manera activa y cómoda, en la redacción de los textos. El segundo, que el escritor narrador fuera alguien cercano a José María Cabrero, conocido y querido por él. Y creo que la elección de José Antonio Adell ha sido muy acertada, porque ha realizado estupendamente su labor. Han pasado más de dos años, un tiempo largo pero intenso. Y por fin, sale a la luz este libro imprescindible, sobre una persona para la que cualquier adjetivo positivo es poco. Los primeros que me vienen a la mente serían: comprometido, generoso, altruista y caritativo. En definitiva, una extraordinaria persona para mí (EL CRISTO EN LA TIERRA). Tener la suerte inmensa de contar con José María Cabrero en nuestros pueblos del Sobrarbe y Somontano, una persona cercana, trabajadora y siempre humilde, y de poder compartir nuestras vidas con él, produce una gran satisfacción. Fácil lo hemos tenido los que nos dedicamos de forma altruista a mejorar nuestros pueblos y nuestro querido territorio, con el consejo siempre certero de una persona que nos transmite positividad y cercanía. Él es y será consecuente con la decisión personal y de vida, de dedicación y compromiso a la fe católica. Quisiera recordar, lejos en el tiempo, pero cerca en la memoria selectiva, la satisfacción que produjo su llegada, la de un cura muy joven, en el año 1977, a las parroquias de Buera, Radiquero, San Pelegrín y Alquézar. Y, cómo día a día, se fue ganando a nuestras gentes con trabajo, cercanía y apoyo personal y su dedicación a la recuperación de nuestro patrimonio religioso. Después, en el año 1995, asumió también las parroquias de Asque y Colungo. Y, en 1999, se incorporaron las de Almazorre, Arcusa, Castellazo, Bárcabo, Eripol, Betorz, Hospilated, Las Bellostas, Lecina, Morcat, Paúles, Santa María de Buil, Santa María de la Nuez y Sarsa de Surta. Y por último la parroquia de Adahuesca en el año 2018.