Este libro es el resultado de la pasión por un territorio y su gente. Hay quien admira la naturaleza como si fuera algo separado del hombre, pero este paisaje que vemos no sería igual sin la presencia de los seres humanos que lo han habitado. Ordesa es el resultado de miles de años de interacción entre la naturaleza y el hombre.
Quién si no puso nombre a cada montaña, río, valle; quién hizo los caminos por los que transitamos, recorridos y cuidados por cientos de generaciones, quién organizó campos y prados, levantó paredes, aprovechó y seleccionó bosques y plantas, construyó pueblos, ermitas y puentes, cultivó alimentos, cazó y domesticó animales. Hoy vemos con sorpresa que, a pesar de la acción y la fama del Parque Nacional, muchos de sus habitantes desaparecen, despoblando estas montañas y haciendo cada vez más palpable la posibilidad de un paisaje sin gente.
Obra escrita en aragonés y castellano.