La epopeya del nacimiento de la ciudad de Sabiñánigo es inseparable de dos hechos fundamentales: la llegada del ferrocarril en 1893 y la instalación de la empresa Energía e Industrias Aragonesas, S. A. (hoy Ercros) en 1918, de la que este año se cumple su centenario. Aquellos franceses pioneros de la hulla blanca, como se denominaba a la hidroelectricidad, no solo forjaron la primera y única ciudad industrial del Pirineo aragonés, sino que explotaron toda la cuenca del Gállego, desde los ibones de Sallent y Panticosa hasta las centrales de Biescas, para usar aquella energía en la fabricación de productos estratégicos y pioneros en su época: amoniaco, ácido sulfúrico, cloro, agua pesada
Conocer la historia de EIASA (o Aragonesas o Ercros) es adentrarse en la génesis de Sabiñánigo y del Pirineo aragonés, tal y como lo conocemos actualmente, la que detuvo parcialmente la sangría de la emigración. La población se trasladó allá donde terminaba el cable, ya fuera Bilbao, Barcelona, Zaragoza o, por vez primera en la montaña aragonesa, en su propio territorio: Sabiñánigo. Allí surgió un pueblo a la manera cómo lo hicieron los del oeste americano.
Para conmemorar el centenario, Ercros confió a Pirineum editorial y al periodista Sergio Sánchez Lanaspa la elaboración de un libro de esos cien años de historia. El volumen de gran formato y del que unos pocos ejemplares salen a la venta con un precio de 25 euros consta de 230 páginas y está dividido en cuatro capítulos que culminan en una completa cronología y un anexo sobre la evolución de las fabricaciones que se han dado en la planta serrablesa a lo largo de un siglo y que elabora el propio director actual de la fábrica, el sabiñaniguense Luis Gállego Pascual. El libro contiene cerca de 300 fotografías de gran valor histórico y cuenta con significativas colaboraciones de personas vinculadas a la fábrica, a la ciudad y a su identidad: Oscar Latas, Enrique Satué, Roberto Iglesias, Carmen Claver y Carlos López Otín.
La compra de terrenos y concesiones en el entorno de la fábrica y en todo el valle de Tena, la huelga de 1932, la fábrica durante la Guerra Civil, la fabricación de agua pesada, la conformación del pueblo-fábrica. La historia y las historias que hay en sus páginas son, sin duda, fascinantes.
Extracto: https://issuu.com/pirineum/docs/ercros__100