Blum tiene una funeraria. También es una mujer encantadora, una esposa feliz y la cariñosa madre de dos niñas. Tiene una buena vida. Una vida que descarrila de pronto, cuando su marido muere en un accidente.
Todo se desmorona. Blum llora su muerte; de repente falta la pieza más importante de su mundo, su sostén, su felicidad. Y entonces, por casualidad, descubre que tras el accidente de su marido puede esconderse algo más.
Blum busca venganza, pero sobre todo se hace preguntas: ¿por qué tuvo que morir su marido? ¿De verdad fue un accidente y el conductor se dio a la fuga, como dice todo el mundo? Cuando obtiene las respuestas, ataca. Sin piedad. ¿Cómo es capaz de algo así? La explicación viene de muchos años atrás...