El final del siglo XVI en Japón se considera la era de las guerras civiles, cuando los señores feudales lucharon entre ellos por tierras y poder. Tras perder a su señor Mifune en una de estas batallas, Miyamoto Usagi vagabundea por el país en busca de armonía, pero encuentra conflictos a cada paso que da. En este volumen, Usagi se ve atrapado entre jefes de bandas enfrentados que han convertido una pequeña localidad en un Infierno de vicios y batallas.
Para lograr la paz en la ciudad, Usagi y el experto espadachín Kato deben elegir un bando, pero cuando tanto Usagi como Kato son traicionados, queda meridianamente claro que no se puede confiar en ninguno de los jefes mafiosos. Incluso cuando se libra de Infierno, Usagi no se libra de los impredecibles vuelcos del peregrinaje de guerrero.