La historia de un chico que tiene que aprender a amar, sin saber aun cuales son las coordenadas del amor. Quiza la mejor novela erotica del siglo XX, en el sentido mas amplio y literario de la palabra
Ganadora del Premio Strega, la gran novela que «dejó abrumada» a Elena Ferrante: «Elsa Morante fue mi maestra. [...] Te hechiza».
«Inolvidable.» Juan Tallón
«Quizála mejor novela erótica del siglo XX.» Culturamas
«Un mazazo que tiene el poder de una maldición.» Dwight Garner, The New York Times
Sus secretos le pertenecian solo a el. A sus silencios, sus alegrias, sus desprecios, sus tormentos nunca les busque explicacion. Para mi eran como sacramentos...
El hombre se llama Wilhelm; camina ensimismado y su hijo Arturo le sigue como una sombra, atento a cada movimiento de su heroe, de quien imagina aventuras y proezas sin fin. Los dos viven en un antiguo convento, un caseron algo apartado del pueblo, donde antes se oian rezos y ahora reinan el silencio y la suciedad.
El padre se ausenta a menudo sin dar razones, y Arturo crece rodeado solo de libros y malas hierbas, hasta que de repente aparece Nunziata, la nueva esposa, y entre los dos se crea una complicidad extraña, casi a espaldas de Wilhelm, que espadre y marido, pero vive en la cuerda floja, con la mirada puesta más allá de la isla de Procida, más allá de Nápoles y del aire tosco que lo rodea.
Solo el mar sabe que piensa y siente ese hombre de cabeza rubia, labios orgullosos y ojos duros; solo el mar y Arturo, que un atardecer descubre a su padre cantando una cancion de amor delante de los ventanucos de una carcel. Suvoz es aspera y desentonada, pero en esa cancion de cuatro versos esta la clave de una de las novelas mas sensuales del siglo XX y el talento de una gran maestra que con esta novela gano el Premio Strega en 1957.
El amor verdadero es asi no busca provecho ni atiende a razones, y no se somete a ningún poder que no sea la disposicion de los humanos.
Elsa Morante
Reseña:
(La escritura de) Elsa Morante es hechizante. He intentado aprender de sus libros, pero me parecen insuperables.
Elena Ferrante
El hombre se llama Wilhelm; camina ensimismado y su hijo Arturo le sigue como una sombra, atento a cada movimiento de su héroe, de quien imagina aventuras y proezas sin fin. Los dos viven en un antiguo convento, un caserón algo apartado del pueblo, donde antes se oían rezos y ahora reinan el silencio y la suciedad.
Arturo crece rodeado de libros y malas hierbas mientras su padre se ausenta a menudo sin dar razones, hasta que un día regresa con Nunziata, su nueva esposa, y entre los dos jóvenes se crea una complicidad extraña, casi a espaldas de Wilhelm, que es padre y marido, pero vive en la cuerda floja, con la mirada puesta más allá de la isla de Prócida, más allá de Nápoles y del aire tosco que lo rodea. Solo el mar sabe qué piensa y siente ese hombre de cabeza rubia, labios orgullosos y ojos duros; solo el mar y Arturo, que un atardecer descubre a su padre cantando una canción de amor delante de los ventanucos de una cárcel. Su voz es áspera y desentonada, pero en esa canción de cuatro versos está la clave de una de las novelas más sensuales de la literatura italiana, ganadora del Premio Strega.
Reseñas:
«La isla de Arturo me dejó abrumada por motivos de los que entonces me avergoncé. Mientras leía, a lo largo de todo el relato, pensé que el verdadero sexo de Arturo era femenino. Arturo era una muchacha, no podía ser de otro modo. Y por más que Morante escribiera sobre un yo masculino, me resultaba imposible no imaginar que era ella, un enmascaramiento de sí misma, de sus sentimientos, de sus emociones.»
Elena Ferrante
«Con una mezcla de ingredientes de realismo y de cuentos de hadas, y marcado por una fuerte sugestión del lenguaje, La isla de Arturo lleva la cruz de ser parte no del presente, sino de la eternidad.»
Jurado del Premio Strega
«Tú, que sientes que el mundo está hecho pedazos, que las cosas por tener en cuenta son muchísimas einconmensurables, con tu lúcida y afectuosa obstinación siempre consigues que todo cuadre.»
Carta de Italo Calvino a Elsa Morante
«Devastadora y de otro mundo, la novela de Morante es un clásico que debería recibir la atención que merece.»
Kirkus Reviews
«Hay lecturas que se vuelven una experiencia, como la de ser el niño y el adolescente que fue Arturo, y al final de la novela descubrir que ya somos adultos. Inolvidable.»
Juan Tallón
«Es una época dorada de recuperaciones editoriales […]: Clarice Lispector, Lucia Berlin... […] Las novelas de Elsa Morante no son difíciles, pero tampoco fáciles: violentas, emocionalmente enredadas, escritas de manera exube